16/11/10

Iconografía Copta


Representación de la Virgen María (Theotokos). The Coptic Network Collection

(Viene del Art.: Iconos (Iconografía) (Libros y Bibliotecas)

La iconografía ortodoxa se basa en ciertos cánones. Veamos:

Ojos grandes: simbolizan el “ojo espiritual”, que mira más allá del mundo material. Al respecto la Biblia dice “La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz” (Mateo, 6:22).

Orejas grandes: escuchan la palabra de Dios; “Si alguno tiene oídos para oír, oiga” (Marcos, 4:23).

Labios pequeños: para glorificar y rogarle a Dios, “… mi boca te alabará con labios de júbilo” (Salmos, 63:5).

En una figura, los ojos y las orejas son desproporcionadamente grandes porque una persona espiritual pasa muchísimo más tiempo escuchando la palabra de Dios y buscando hacer la voluntad de Dios.

La boca: como a menudo es fuente de palabras vacías o dañinas, es pequeña.

La nariz, que se ve sensual, también es pequeña.

Además, cuando en un icono se representa algún personaje maligno, siempre está de perfil, porque no es deseable hacer contacto visual con una persona así, y mucho menos detenerse a meditar sobre ella.

Las figuras en los iconos coptos a menudo tienen cabezas grandes, lo cual quiere decir que estos individuos se dedican a la contemplación y la oración.

Los artistas de iconos entendieron profundamente el significado y los beneficios de los iconos en la vida espiritual de los creyentes.

Es interesente señalar que la mayoría de los artistas coptos, en cuanto a los íconos, no firmaron con sus nombres. No estaban buscando su glorificación o la fama, incluso los pocos que sí firmaron con sus nombres lo hicieron en forma de plegaria, del estilo “Recuerda, Oh Señor, a tu siervo (nombre)”.

Algunos iconos representan a Santos que sufrieron y fueron torturados por su fe con rostros pacíficos y sonrientes, demostrando así que su paz interior no había sido perturbada, ni siquiera por el sufrimiento que soportaron, y que sufrieron de buena voluntad y con regocijo por el Señor.

Aunque el estilo artístico de la iconografía varía un poco de una cultura a otra, todos los iconos ortodoxos tienen el mismo sentido, uso y simbolismo. Esto incluye a todas las Iglesias Ortodoxas Orientales, es decir, la Griega, la Rusa, la Serbia, la Búlgara, y también la Copta, la Armenia, la Siria, la Etíope, etc.

En la iconografía copta, han sobresalido algunos nombres. En orden cronológico, están:

1. San Lucas el Evangelista, talentoso artista, a quien se le atribuye la pintura del primer icono.

2. Papa Macario I, el Patricarca No.59 (931-950).

3. Abu Yuso ibn Yalg, del siglo XII.

4. Papa Gabriel III, el Patriarca No.77 (1261-1263).

5. Juan el-Nassikh, Baghdady Abu el-Saad, y Juan el Armenio, de los siglos XVII y

XVIII.

6. Anastasio el Griego, del siglo XIX.

Actualmente, el arte de la iconografía copta está en pleno renacimiento, gracias a talentosos artistas, tanto profesionales como aficionados. El Dr. Ishaq Fanous, profesor de Arte Copto en el Instituto Copto de Altos Estudios Coptos, en El Cairo, se ha destacado en obras en varias iglesias en Egipto y en el exterior.

Véase además:

Si lo desean, hay una excelente galería de imágenes en: Coptic Art Studio (se los recomiendo)

Galería de Imágenes en: The Coptic Network / Picture Archive


Fuente Consultada:
 
Icons: Their history and Spiritual Significance / By Dr. Zakaria Wahba.--  Adapted for Copt-Net from "The Orchard" monthly review , Published by St. Mark Coptic Orthodox Church, Washington DC, USA., January 1993. En:  Encyclopedia Coptica. The Christian Orthodox Church of Egypt




Manuscritos Coptos (2)


7. Dialectos

Los manuscritos coptos han llegado hasta nosotros escritos en varios dialectos y subdialectos. Los más numerosos están en sahídico y bohaírico. Los que están en sahídico abarcan desde el siglo III hasta el siglo XV. Cubren una gran variedad de temas, como por ejemplo la Biblia, la hagiografía, la patrística, monástica, etc. Muchos de los manuscritos se conservan fuera de Egipto, en un estado más o menos desmembrado.

Los escritos en bohaírico son más numerosos pero de fechas posteriores. El más antiguo es del siglo IX, aunque también se encuentran algunos ejemplares raros del siglo IV. La tradición de manuscritos en este dialecto continuó hasta principios del siglo XX. La mayoría de estos manuscritos corresponden a textos bíblicos o litúrgicos, pero también existe una biblioteca hagiográfica y patrística, de considerable tamaño, que perteneció al monasterio de San Macario y que ahora se encuentra en el Vaticano.


A pesar de que muchos están fuera de Egipto, también hay otros varios que se conservan en las principales colecciones de Manuscritos Coptos dentro del país. En su mayoría están intactos.

Otros importantes dialectos preservados en textos son: el ajmímico, el asyútico, el egipcio medio (meso-kémico), y el fayúmico.

8. Datación

Las fechas de los manuscritos no siempre están registradas en sus hojas. Y cuando lo están, aparecen en una variedad de formatos.

En los primeros manuscritos se utilizaban los años de indicción (un ciclo de quince años) y una referencia al emperador romano de la época. Más tarde, se introdujo la cronología del Año Copto o el año de los Mártires, que se refiere al año 284.

En los manuscritos medievales incluso se agregaba una referencia al Calendario Islámico, a veces alusivo al año de los Hijos de Agar. Las fechas van desde el siglo III hasta principios del siglo XX.

9. Temas

En los manuscritos conservados se incluyen varios temas. Los más importantes son:

a. Literatura

1) Bíblica: el Nuevo Testamento se conserva completo en bohaírico y en sahídico, con algunos libros y fragmentos en otros dialectos. La mayoría de los libros históricos y algunos de los literarios del Antiguo Testamento estaban en bohaírico, pero han desaparecido. Sin embargo, muchos de ellos están en sahídico. Los otros dialectos conservan porciones paralelas, pero alcanzan a cubrir el bache que queda.
2) Patrística: Los escritos de muchos Padres de la Iglesia Copta, o quienes eran muy leídos en la Iglesia Copta, están en sahídico y en bohaírico. Las Bibliotecas del Monasterio Blanco de San Shenouda (conservadas en varios lugares), de San Macario (bohaírico), de San Miguel de Hamouli (Nueva York), y de San Miguel de Edfu (Londres), contienen la mayoría de estos tesoros. Los más en número, y los peores en forma, son los corpus de escritos de San Shenouda el Archimandrita. Varios Escritos son preservados también por San Athanasius, Cirilo I, Cirilo de Jerusalén, Juan Crisóstomo, Pacomio y sus discípulos, Besa, y otros. En su mayoría están escritos en sahídico.


 3) Hagiográfica: Una variedad de martirologios y vidas de los santos y padres monásticos se conserva en lengua copta. Las obras de la era de los Mártires y de Dioclesiano, San Antonio, San Pacomio, San Shenouda, y San Macario, son las más notables de este grupo. Están bien documentados también manuscritos en bohaírico y sahídico.

4) Litúrgica: la mayoría de los manuscritos litúrgicos están en bohaírico, con algunos en sahídico. Estos incluyen: eucologios, horologios, leccionarios, salmodias, Ordinarios y Oficios. Es el grupo mejor conservado (en número).



5) Canónica: Algunos cánones de los Padres, así como también los Concilios, están en sahídico, pero no hay un conjunto completo.


6) Histórica: Esta es la clase menos representada entre los manuscritos literarios. Solamente se han identificado unos pocos manuscritos referentes a la Historia de la Iglesia , y están en sahídico.


b. No literarios: la mayoría está en sahídico.

1) Documentos legales: Contratos, testamentos, escrituras de propiedad, etc.



2) Cartas: Correspondencia privada entre gente del pueblo, o también entre clérigos de las iglesias o de los monasterios.


c. Varios:

1) Lexicográficos: están escritos en dos categorías: “Muqademat” (gramática) y “Salalem” o “scalae” (listas de vocabulario). Algunos están en sahídico, pero la mayoría están en bohaírico y árabe.


2) Gnósticos y maniqueos: se convirtieron en los más importantes para el estudio entre los eruditos, debido al descubrimiento de los textos de Nag Hammadi, textos sahídicos, y los textos maniqueos en dialecto asyútico. Cientos de estudiosos participaron en su estudio, durante el último cuarto del siglo pasado. Los textos maniqueos se consideran uno de los mejores escritos en lengua copta.

3) Astronómicos y Astrológicos: hay pocos.

4) Médicos: hay pocos.

5) Mágicos: hay varios textos mágicos de estilo cristiano conservados en lengua copta. Son muy importantes en el estudio de las creencias populares que existían entre los coptos en diferentes momentos de su historia.-


Véase además: Manuscritos Coptos (1)








































































































12/11/10

Manuscritos Coptos (1)





El término “copto” se aplica a los cristianos en Egipto. La Iglesia Copta fue fundada en Egipto en el siglo I de nuestra Era. Se basa en las enseñanzas de San Marcos, quien llevó el cristianismo a Egipto en la época del emperador Nerón. Junto al resto de las antiguas iglesias orientales se separó de la Iglesia de Roma en el Concilio de Calcedonia, del año 451, pero en este punto vamos a hacer una pausa. Es un tema que en el próximo artículo voy a desarrollar con mayor exactitud.

Hoy quiero centrarme en los manuscritos coptos.

Muchos de estos tesoros culturales ya no están en Egipto. De ellos, varios cayeron víctimas de incendios, de guerras mundiales, y del olvido de coleccionistas privados. Lo que quedó en Egipto no tuvo mejor suerte: en gran parte debido a la ignorancia de los que se enriquecieron a costa del tráfico de estas maravillosas obras de arte.

La Sociedad Copta San Shenouda El Archimandrita durante mucho tiempo reconoció el valor de estos tesoros. De modo que se embarcó en la ardua empresa de microfilmar todos los manuscritos coptos. El propósito de la colección es preservar y estudiar estos tesoros. Hasta ahora se obtuvieron unos 200.000 microfilmes de manuscritos coptos, copto-arábigos, y arabo-cristianos. Esto equivale a aproximadamente 300.000 páginas. En la actualidad la colección está siendo utilizada para la compilación de la Biblia Copta, produciendo ediciones de textos críticos de libros litúrgicos, y proyectos de traducción. La colección está disponible en el Centro de Estudios Coptos de la Sociedad, en Los Ángeles, y algunas copias están disponibles en el Centro Regional del Condado de Orange.


1. Forma


Los manuscritos nos han llegado de dos formas:


Códice: es el formato de libro, donde las páginas están combinadas formando cuadernillos (o manos), y a su vez estos cuadernillos están pegados para formar así un libro. Este formato posiblemente fue inventado por los primeros cristianos para distinguir sus escritos de los de los judíos (que preferían el formato rollo). Tanto los cristianos como los judíos, en los primeros siglos, escribían sus obras en griego.



Rollo: este formato era raro entre los cristianos en general (y entre los cristianos egipcios en particular). Pero no obstante sobrevivieron algunos rollos pequeños, con materiales coptos. Se trata de registros que pueden leerse de forma horizontal o vertical a lo largo de una hoja enrollada. Estos rollos en general contenían textos mágicos.



2. Materiales de escritura



Los coptos utilizaron una gran variedad de materiales para registrar sus escritos. La elección dependía de la disponibilidad. Los materiales que han sobrevivido al paso del tiempo son:
Papiro: como es de invención egipcia, tomó el mundo antiguo como un vendaval. Se convirtió en el material elegido por los escribas del pasado. Siguió en uso, a veces, hasta el siglo X. Este material proviene de la corteza de la planta llamada “Papyrus”: se cortaba en tiras, estas tiras se disponían de forma horizontal y vertical (entrelazadas), y se prensaban. Luego se unían estas hojas “entrelazadas”, y se formaba un rollo. Y finalmente el rollo se cortaba en hojas para facilitar su uso en un formato de códice. Es decir, este formato tiene la característica especial de que cada hoja tiene láminas verticales en el anverso y láminas horizontales en el reverso.



Pergamino: la piel de gacela se usó durante mucho tiempo para escribir manuscritos. Si embargo, no ganó popularidad sino hasta el ocaso del papiro. Esto ocurrió alrededor de los siglos VIII-IX. Se fabricaba preparando la piel en láminas muy finitas, se salaban y se secaban hasta que estuvieran en condiciones aptas para la escritura. Este formato se caracterizaba por tener una superficie lisa, el lado de la carne, y otra rugosa, el lado del pelo. Este tipo de material escriptóreo continuó en uso hasta principios del siglo XIII.

Papel oriental: en el siglo XIII, el mundo de la escritura se vio enriquecido con la aparición del papel de lino en Medio Oriente. La manufactura de este papel floreció principalmente en Egipto. Debido a que la producción era mucho más barata, reemplazó rápidamente al pergamino como material para la escritura, pero no por mucho tiempo.

Papel europeo: en el siglo XIV. Los molinos italianos comenzaron a producir un papel similar pero más económico. Se caracterizaba por la introducción de marcas de agua para distinguir las producciones de los diferentes fabricantes. Finalmente reemplazó al papel de lino oriental, que aparentemente cayó víctima del colapso de las dinastías árabes musulmanas en Medio Oriente aproximadamente en los siglos XIV-XV.

Tabletas de piedra caliza: muchos escritos, literarios y no literarios, se registraron con tinta sobre tabletas de piedra caliza. Muchas de estas tabletas se han descubierto en excavaciones de diferentes sitios monásticos antiguos en Egipto.

Tablas de madera: algunos escritos se han conservado en pequeñas tablitas de madera. Esta práctica era relativamente rara en Egipto, pero igual constituía una de las formas más antigua de escritura.

Trozos de cerámica. Un material mucho más común y económico eran los fragmentos de cerámica, que se utilizaban para registrar breves textos literarios, o extractos, y para cuestiones no literarias, como cartas y textos legales. Miles de estas piezas, referidas comúnmente como ostracas, se conservan en museos y bibliotecas de Europa y Estados Unidos.

Huesos: en los primeros siglos de la cristiandad copta en ocasiones se utilizaron huesos de animales para escribir. Los textos conservados en este caso son, usualmente, de menor importancia que los registrados en materiales escriptorios ya mencionados.

3. Materiales para la escritura

Los coptos utilizaban el material disponible en su ambiente, para crear tinta en una variedad de colores para usar en el registro de sus manuscritos. Los monjes eran especialmente conocidos por su habilidad en tales prácticas. Algunas de estas herramientas de escritura de producción local eran:


Tinta: la tinta utilizada en los manuscritos era preparada químicamente a partir de materiales especiales a los que se le agregaba goma arábiga para darle cohesión. Evidencias de esta práctica se encuentran en una historia acerca del Monasterio de San Macario en el Desierto Nitriano durante el siglo XII. Allí se dice que las autoridades confiscaron tales materiales específicos usados para la escritura por parte de los monjes, en base al testimonio difamador de un monje expulsado.

Plumas: sobre todo se usaban cañas de madera. Se conservan varios ejemplos en el Museo Copto del Antiguo Cairo. También se han encontrado algunas plumas hechas de plata.

Estuches: se han encontrado varios estuches para guardar los instrumentos de escritura. Algunos están hechos de madera, pero más comúnmente de cuero. Datan de hasta el siglo IV a.C., y todavía se conservan en museos.

Tinteros: Los copistas empleaban pequeños recipientes para las diferentes tintas que se usaban en la producción de manuscritos. Se han encontrado varios ejemplos de estos “tinteros” en excavaciones en antiguos monasterios del Alto Egipto, con visibles restos de tinta en su interior.

4. Encuadernación

Para conservar intactos a los manuscritos, los coptos realizaban una encuadernación en cuero. Esta práctica dio lugar a un floreciente arte que llegó a alcanzar altísimos niveles. A estas encuadernaciones se las estampaba, con sellos especiales, para proporcionarles diseños elocuentes: por ejemplo, cruces, figuras de los apóstoles, o de los santos. La Pierpont Morgan Library, en Nueva York, conserva una notable colección de encuadernaciones coptas como parte de su colección mayor del antiguo monasterio de San Miguel en El Fayoum.


5. Formato

El formato de los manuscritos coptos nos da un indicio de la fecha y el propósito de tales documentos. Tiene varias características distintivas, únicas. Estos son sólo algunos ejemplos:


Rúbricas: La palabra procede del latín “rubrica”, que significa “rojo”. Con respecto a los manuscritos, se refiere a los encabezados o títulos que, por lo general, se escribían en un color rojo distintivo. En los manuscritos coptos, se escribían en caracteres grandes (letra capital).

Colores: Los coptos usaban una amplia variedad de colores en sus manuscritos. El rojo se reservaba para las rúbricas, y el negro para el material textual en general. Otros hermosos colores, como el amarillo, el azul, el verde, el dorado, y la plata, se utilizaban principalmente para los ornamentos con que decoraban sus manuscritos.

Columnas: Los manuscritos coptos están escritos en una o en dos columnas (cuando están redactados completamente en lengua copta). El formato de una sola columna era el más antiguo. A partir del siglo VII se empezó a escribir en dos columnas, especialmente los textos de uso litúrgico. Naturalmente, en el caso de escritos bilingües (copto-griego) se escribía en dos columnas.

Presentación bilingüe: Históricamente, los manuscritos de los cristianos de Egipto se escribían primero en griego, luego en copto y finalmente en árabe. Para la mayoría de las funciones litúrgicas, los manuscritos se producían utilizando combinaciones de cualquiera de los textos no-coptos con el texto copto. En otras palabras: se producían en copto-griego o en copto-árabe. El copto-griego fue, definitivamente, el más antiguo de los dos. Algunos manuscritos han sobrevivido con la columna copta escrita en caracteres árabes, una mala costumbre que todavía en la actualidad sigue vigente en muchas de las ediciones de libros litúrgicos de la Iglesia Copta.


Cabe señalar que los manuscritos bilingües coptos-árabes no se utilizaban en los servicios eucarísticos. Esto se ve claramente en la existencia de manuscritos solamente coptos (o solamente árabes) de los diferentes leccionarios de la Iglesia Copta: el hecho es que cada versión se lee desde un atril diferente.

Tamaño. El tamaño es una característica muy importante de estos manuscritos. Normalmente un manuscrito de tamaño reducido era producido con fines de uso individual, ya fuera privado o eclesiástico. El formato más grande era típicamente producido para su uso litúrgico, como libro de lectura, y se colocaba en los atriles.

Paginación. Los coptos utilizaban varios métodos de paginación, y este dato es muy importante para los investigadores que intentan rearmar piezas originales a partir de fragmentos o folios sueltos.

Habitualmente empleaban dos conjuntos de números, uno para el folio y otro para el cuadernillo (o mano). El número del folio se colocaba en la esquina superior externa del lado izquierdo del folio (reverso de la hoja). El número del cuadernillo tradicionalmente está en la página inicial derecha (lado derecho de la página) y en la página izquierda del último folio. Usualmente el número está escrito en las dos esquinas superiores de la página, con un pequeño ornamento en el centro superior.


Rulado. Para una mejor calidad de trabajo, antes de comenzar a escribir se utilizaba un patrón de rulado, que se basaba en un sistema con el que los escribas estaban familiarizados.

Colofón. Al final del manuscrito, el escriba anotaba una pequeña sección a modo de conclusión. En los manuscritos más antiguos para esta sección el escriba podía utilizar una letra diferente, cursiva. Sin embargo, en los manuscritos más “modernos” esta práctica se abandonó a favor de una letra similar a la del resto del manuscrito. En este colofón el escriba por lo general coloca una pequeña oración, pero también otro tipo de información, como su nombre, profesión, lugar de escritura, propiedad, y fecha de terminación. Muchas veces la información contenida en el colofón es tanto o más importante que todo el resto del manuscrito completo.

6. Iluminación

Los coptos decoraban sus manuscritos con una cantidad de diseños e imágenes grabadas en varios colores preciosos. Los manuscritos diseñados para uso eclesiástico parecen tener más decorados. Algunas de las principales características de la decoración copta de manuscritos son las siguientes:

Marcas de párrafo: los coptos utilizaban diseños decorativos para la letra inicial de un párrafo, combinando imágenes con hábiles diseños. Además se agregaban simples marcas intermedias y finales (por ejemplo, antilambda o diple).
Decoraciones: a lo largo de una página manuscrita se encuentran dibujos o diseños geométricos en los márgenes, tanto al comienzo como al final de secciones. También hay hermosos monogramas al principio y al final de cada cuadernillo.

Cruces: la mayoría de los manuscritos litúrgicos están ornamentados con una página inicial plena, con una cruz de bellísimo diseño. A veces se agregan miniaturas o pájaros en los cuadrantes de la cruz.

Miniaturas: una de las características más hermosas de un manuscrito es una pintura iconográfica a página completa o parcial. Los temas representados por las miniaturas van desde escenas del Antiguo y el Nuevo Testamento, en sus respectivos manuscritos bíblicos, hasta representaciones hagiográficas en manuscritos litúrgicos y literarios. El más iluminado de todos los manuscritos coptos es el Paris FourGospels Bohairic B.N. Copte 13.


véase además: Manuscritos Coptos (2)


Fuente Consultada: